Reyes Magos: El Tesoro de Marruecos

El desierto, donde la magia cobra vida En medio del silencio dorado del Sáhara, las dunas se alzan como olas inmóviles bajo un cielo infinito. Cada paso entre la arena es una aventura, cada puesta de sol, un espectáculo que emociona. Aquí, las familias redescubren el valor de lo simple, de mirar al horizonte juntos y soñar despiertos bajo las estrellas. Porque hay paisajes que no solo se ven… se sienten. #viajacontufamilia

Marrakech, el latido mágico de Marruecos Pasear por Marrakech es como entrar en un cuento en movimiento. Sus calles vibran con aromas exóticos, colores intensos y sonidos que envuelven. Desde la majestuosa Koutoubia hasta los zocos llenos de artesanos, esta ciudad despierta los sentidos y la imaginación. Un lugar donde niños y adultos se maravillan por igual, y donde la aventura comienza al cruzar cada esquina.

Marruecos, donde comienza la aventura Marruecos no se recorre, se vive. Es un país de contrastes vibrantes: ciudades llenas de historia, desiertos que parecen eternos, palmerales infinitos y mercados donde el tiempo se detiene. Cada rincón guarda una historia, cada mirada refleja hospitalidad. Para las familias, es un destino que despierta la curiosidad de los niños y el asombro de los adultos. Marruecos es esa experiencia que une, sorprende y deja huella. #viajacontufamilia

Boumalne du Dadès nos regala uno de los paisajes más asombrosos del viaje: una carretera que se retuerce como una serpiente entre paredes de roca rojiza, donde el silencio del desfiladero solo se rompe por el viento y las historias que cuentan los antiguos pobladores bereberes. Una parada espectacular que hará soñar a grandes y pequeños.

Después de cada día lleno de emociones, descubrimientos y momentos compartidos en familia, llega el momento de descansar… y en este viaje, el descanso también forma parte de la magia. Hemos seleccionado cuidadosamente alojamientos que no solo ofrecen confort, sino que potencian la experiencia del viaje, convirtiendo cada noche en una continuación del cuento que estáis viviendo juntos. 

MARRAKECH – Hotel Zalagh Kasbah En el corazón de la ciudad roja, donde la historia se mezcla con el bullicio de los zocos y el canto del muecín al caer la tarde, el Hotel Zalagh Kasbah se presenta como un refugio sereno para las familias que inician su aventura. Es un hotel que entiende las necesidades del viajero moderno sin renunciar a la esencia marroquí: muros de adobe, jardines cuidados, fuentes que susurran y rincones donde descansar después de un día lleno de descubrimientos. Las familias españolas encontrarán aquí el equilibrio perfecto: habitaciones amplias ideales para compartir sin agobios, piscina para refrescarse tras explorar la medina, y un restaurante con sabores locales que conquista hasta los paladares más jóvenes. Lo mejor, sin duda, es esa sensación de llegar “a casa” después de recorrer Marrakech, sabiendo que los pequeños pueden jugar con libertad mientras los adultos se relajan con una infusión caliente bajo el cielo estrellado.

Entre montañas que parecen esculpidas por gigantes y gargantas que dibujan caprichos naturales, el Hotel Xaluca Dades es una joya pensada para quienes buscan algo más que alojamiento: una experiencia sensorial. Este hotel, construido al estilo tradicional bereber, consigue que las familias se sientan parte del paisaje. Sus materiales nobles, sus techos altos, los detalles artesanales y la calidez de su personal lo convierten en un espacio acogedor, auténtico y profundamente humano. Aquí los niños disfrutan de los amplios espacios interiores y exteriores, del contacto directo con la naturaleza, del olor a tierra y a fuego lento. Los padres encuentran momentos de silencio, de desconexión real, de conversación sin prisas. Tras la ruta entre kasbahs y valles, este lugar es un regalo para los sentidos: relajación, conexión, confort y belleza natural por todas partes.

ERFOUD – Kasbah Xaluca Maadid A las puertas del desierto, la Kasbah Xaluca Maadid se alza majestuosa, como si hubiese estado allí desde siempre esperando vuestra llegada. En este hotel, cada piedra cuenta una historia, cada rincón guarda un secreto del desierto. Diseñado como una fortaleza tradicional marroquí, este alojamiento no solo acoge: envuelve. Es ideal para familias que desean algo distinto: habitaciones amplias con decoración típica, piscinas que refrescan los días más cálidos, un restaurante que mezcla cocina internacional y platos autóctonos, y zonas comunes donde los niños pueden corretear sin preocupación. Aquí empieza la verdadera transición entre la civilización y la inmensidad del Sáhara. Todo está pensado para hacer de esta parada algo memorable: desde los olores especiados al desayuno hasta las conversaciones bajo las estrellas.

El cielo más estrellado que jamás hayas visto. El Bivouac Royal Camp, en pleno corazón del desierto de Merzouga, es el escenario perfecto para vivir una noche mágica. Dormir en haimas bajo las estrellas, rodeados de dunas, es una experiencia que une a las familias como pocas cosas pueden hacerlo. Aquí no hay pantallas, ni relojes, solo risas, canciones, historias contadas a la luz del fuego y miradas que lo dicen todo. El confort de las tiendas, combinando lo rústico con lo auténtico, hace de esta noche algo que los más pequeños recordarán toda su vida… y los adultos también. Y entonces, el desierto. La emoción de llegar a Merzouga y descubrir el Bivouac Royal Camp es difícil de describir con palabras. Este no es solo un campamento: es una cápsula de magia enclavada en mitad del mar de dunas de Erg Chebbi. Dormir aquí es como entrar en las páginas de un cuento que los niños han oído mil veces, pero que ahora vivirán de verdad. Las haimas están equipadas para ofrecer una experiencia cómoda y segura, sin perder el encanto de lo auténtico. Por la noche, la arena se enfría, las estrellas se encienden y el silencio se convierte en música. Alrededor del fuego, se comparten cuentos, se cantan canciones, se escuchan los tambores del desierto. Padres e hijos se miran sin decir nada, porque saben que este instante —exactamente este— será un recuerdo eterno. Es la noche donde se despierta la magia, donde todos los caminos conducen al corazón. 

La última parada antes del regreso al punto de partida es Ouarzazate, conocida como el Hollywood de Marruecos. Y aquí os espera el Hotel Karam Palace, un lugar con alma, historia y vistas que cortan la respiración. Este hotel tradicional marroquí se eleva sobre la ciudad con el Atlas al fondo, regalando una panorámica que impresiona incluso a los más viajeros. Las familias disfrutan aquí de habitaciones amplias, jardines donde pasear sin prisa y una gastronomía que hace homenaje a la tierra. Es el espacio perfecto para asimilar todo lo vivido: los juegos, las pistas, las risas en el desierto, las historias de los zocos, la emoción de los más pequeños. Aquí, cada rincón invita al descanso, al relato compartido, al reencuentro. El Karam Palace es el telón perfecto para cerrar una experiencia que, sin duda, se recordará toda la vida.

Un viaje donde los hoteles también cuentan historias En este itinerario familiar por Marruecos, cada alojamiento ha sido cuidadosamente elegido para aportar algo único. No son simples lugares para dormir: son escenarios que completan la narrativa, refugios que permiten recuperar fuerzas, espacios que enriquecen la experiencia de grandes y pequeños En VCTF sabemos que los viajes que realmente marcan no dependen solo del destino, sino de cómo se vive cada momento. Por eso, diseñamos itinerarios completos que equilibran aventura y descanso, emoción y seguridad, cultura y diversión. Porque lo que queremos no es solo que viajes… sino que vuelvas a casa con una historia que contar.